Alquiler de volquetes zona norte – Un problema y su solución
En ocasiones no saber qué hacer con los escombros generados en una obra de remodelación afecta el natural desenvolvimiento del proyecto; ya que, no se pueden mezclar con los desperdicios ordinarios que proceden de los hogares, ni dejarlos a la intemperie sujetos a que la brisa se los lleve. Pero, al proceder con un alquiler de volquetes zona norte se soluciona el problema.
Existen empresas que han hecho de esta labor un arte y proveen de los recipientes, en diferentes tamaños, elegidos de acuerdo a la cantidad de desechos y a la velocidad de generación del contenido. La idea es que no resulten pequeños que haya que cambiarlos con una frecuencia exagerada o no quepa el material. Por otro lado, si por ser muy grandes se mantienen ociosos, tampoco es rentable.
Prácticamente no hay límite en cuanto a lo que se puede descargar por medio de este sistema; no obstante, tenga en cuenta que no está permitido usarlos para desechar ciertos productos contaminantes o tóxicos, ni quemar basura en su interior. Si el contenido es biodegradable pídalos con tapa; así, se evitan los malos olores y la proliferación de insectos peligrosos.
¿Cuál sería el procedimiento a seguir?
Por lo general, se establece un contrato con la empresa, ya sea por vía telefónica o a través de la página web. Se acuerdan los tamaños (chicos, grandes o gigantes), número de unidades requeridas y períodos de recolección. Asegúrese de estimar bien el tiempo de llenado para que no sean trasladados medio vacíos o, por el contrario, ocurran demoras y pasen un lapso más extenso de lo necesario, llenos, bajo su control.
En muchas zonas de la ciudad de Buenos Aires aplica que los volquetes pueden estacionar en la vía pública, sometidos a directrices similares a las que aplican para los vehículos. Sin embargo, se requiere una cierta permisología y, a veces, hay que cumplir con horarios específicos. La compañía que elija le asesorará al respecto.
Al contratar este servicio usted se elimina el gasto asociado a un vehículo de transporte y un chófer para deshacerse del material, ahorra tiempo y no tiene que preocuparse de encontrar a donde llevarlo. Estas empresas conocen cuales son los vertederos municipales, en los que está legalmente autorizado depositar cada desecho.